Por todos es conocido que, por ajustes de los meridianos, en estas vamos con una hora menos de diferencia con respecto al territorio peninsular. Lo que yo nunca me pude llegar a imaginar es que esa diferencia horaria le iba a afectar a nuestro querido Corte Inglés, rey indiscutible de las temporadas comerciales y nos iba a empezar la campaña de Navidad a mediados de Octubre. Si, si como lo oyen…. Y me están poniendo el decorado en el centro comercial y aparecen las primeras bolitas en los chinos y tiendas de decoración. No hemos soltado el bañador y ahí esta el pobre Papá Noel con su grueso traje rojo Coca-cola intentando animar a sus pobres renos. Me estoy empezando a plantear que lo que realmente quieren es cargarse el espíritu navideño, porque a ver qué ganas de Navidad vamos a tener el 24 de Diciembre, cuando ya llevemos casi dos meses de preparativos. En esos dos meses ya no sabremos que regalar, habremos cambiado unas cuantas veces de idea sobre lo que más les va a sorprender y qué vamos a estrenar el Día de Fin de Año. Y otra cosa que me llama la atención es la cantidad de anuncios de colonias que nos atacan, como si el resto del año no nos perfumáramos.
Las películas empiezan una hora antes que en el resto del territorio nacional, así que cuando se suponen que van a empezar y ponemos la televisión ya van por la mitad: ventaja: si es un rollo de película cambias de canal. Inconveniente: como estuvieras esperando con ilusión a ver la película que te perdiste en el cine, como llegas a la mitad te agarras un mosqueo que te agria la cena. Eso sí, aquí nos podemos tomar las uvas dos veces, una a hora peninsular y otra a la hora canaria, por lo que empezamos brindando 2 veces y terminas con un puntillo alegre y chispeante antes de lo esperado. Si alguien se anima a brindar dos veces no tiene más que sintonizar la TV canaria y verá además que divertidas son las campanadas sin apenas frío. Ahí les dejo pensándoselo hasta la próxima semana.
